Estilo Sofisticado: Descubre Nuestra Pulsera Bizantina con Tonalidades Duales
8,10 €
Impuestos incluidos
Ref.: 1BEbiz4
Calidad de la pulsera: acero inoxidable 316L
Largo total: 20,5cm.
Ancho total: 0,8cm.
Peso total: 33,8gr.
La joyería bizantina, conocida como la "Reina B" en el mundo de las piezas históricas, destaca por sus diseños grandiosos y exuberantes, confeccionados en oro amarillo y una amplia variedad de piedras preciosas.
Durante la Edad Media, las joyas, la historia y el arte bizantinos dejaron una impresión imborrable, fascinando a todos aquellos que tienen el privilegio de contemplarlas y despertando preguntas sobre la opulencia y el poder del antiguo Imperio Bizantino.
La tradición de la joyería bizantina se arraigó profundamente, heredando las influencias romanas y floreciendo tras los muros de la nueva capital, Constantinopla.
El estilo distintivo de las cadenas bizantinas, con su intrincado entrelazado metálico que evoca una textura de cuerda y una sensación orgánica, sigue siendo un enigma en cuanto a su nombre y origen, aunque su suavidad, flexibilidad y cobertura son reconocidas por su calidad.
Las joyas bizantinas a menudo presentaban piedras redondeadas, hábilmente ensartadas en cadenas de oro, adornando collares que eran el centro de atención, realzados por gruesas cadenas de oro. Los artesanos meticulosamente montaban las piedras preciosas en engastes de oro, creando piezas que eran verdaderas obras de arte en sí mismas.
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1BEbiz4
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Ref.: 1BEbiz4
Calidad de la pulsera: acero inoxidable 316L
Largo total: 20,5cm.
Ancho total: 0,8cm.
Peso total: 33,8gr.
La joyería bizantina, conocida como la "Reina B" en el mundo de las piezas históricas, destaca por sus diseños grandiosos y exuberantes, confeccionados en oro amarillo y una amplia variedad de piedras preciosas.
Durante la Edad Media, las joyas, la historia y el arte bizantinos dejaron una impresión imborrable, fascinando a todos aquellos que tienen el privilegio de contemplarlas y despertando preguntas sobre la opulencia y el poder del antiguo Imperio Bizantino.
La tradición de la joyería bizantina se arraigó profundamente, heredando las influencias romanas y floreciendo tras los muros de la nueva capital, Constantinopla.
El estilo distintivo de las cadenas bizantinas, con su intrincado entrelazado metálico que evoca una textura de cuerda y una sensación orgánica, sigue siendo un enigma en cuanto a su nombre y origen, aunque su suavidad, flexibilidad y cobertura son reconocidas por su calidad.
Las joyas bizantinas a menudo presentaban piedras redondeadas, hábilmente ensartadas en cadenas de oro, adornando collares que eran el centro de atención, realzados por gruesas cadenas de oro. Los artesanos meticulosamente montaban las piedras preciosas en engastes de oro, creando piezas que eran verdaderas obras de arte en sí mismas.